La Tertulia Taurina Macarena con el ciclo de novilladas de promoción

El triunfador del ciclo y de la noche, Paco Lama de Góngora, pasea el único trofeo que cortó a su primer enemigo

Bellas señoritas sevillanas iluminaron con su lozanía los tendidos del Coso Maestrante

Los componentes de la Tertulia Taurina Macarena se fotografiaban a la finalización de la novillada en el ruedo de la Real Maestraza de Caballería

Como viene siendo habitual en esta joven Tertulia Cultural Taurina Macarena desde su fundación, una nutrida representación de los integrantes de la misma han asistido al ciclo completo de las novilladas nocturnas de promoción celebradas en el Coso Maestrante.

Así, el pasado jueves día 2 de agosto asistíamos a la final del ciclo de este año, había expectación por ver en acción a la nueva sensación del mundo taurino sevillano, el joven Paco Lama de Góngora, tras el rotundo éxito alcanzado, -ratificado con su salida a hombros por la Puerta del Príncipe-, en la primera de sus comparecencias, el cual, a la postre, sería declarado vencedor del ciclo, obteniendo como premio un traje de luces. No en vano hacía la friolera de dieciocho años que no salía por la Puerta del Príncipe un novillero sin caballos, correspondiendo tal honor a Luis Reinoso Vaqueriza, "El Cartujano".

No se recordaba tanta expectación en este ciclo de novilladas desde hacía casi veinte años, cuando Javier Andana, de Camas; Juan Manuel Benítez, de Dos Hermanas, y José Luis Moreno "Joselu de la Macarena", de Sevilla, en la final de 1993, encandilaron a la afición local, la cual llenó por completo los tendidos.  El éxito de la final de este año se vio refrendada con los casi tres cuartos de entrada largos que presentaba la plaza, en noche calurosa tirando a bochornosa.

Tres fueron los espadas que llegaron a este final, Miguel Ángel León, de la Escuela Taurina de Gerena; Alejandro Pavón de la Escuela Taurina de Sevilla-Amate y Paco Lama de Góngora, de la Escuela Taurina de Sevilla.

Gran predisposición al triunfo mostró en todo momento Miguel Ángel León, destacando sobradamente en los lances de capote ejecutados a su primer oponente, así como al segundo, cuarto de la noche, al que recibió a "portagayola", buscando el triunfo sin cuentos ni miramientos de ningún tipo, con varias largas cambiadas que cautivaron al público presente. Sus dos faenas de muleta tuvieron buenos lances, aunque quizás abusase en exceso en los abrazos a los astados en los circulares en redondo. Mató rematadamente mal en ambos toros, con sartenazos, estocadas contrarias y desprendidas que hacían guardia, por lo que perdió la posibilidad de un triunfo mayor. Pese a que hubo petición no mayoritaria en ambos toros, la presidencia de la corrida, con buen criterio, no concedió las orejas, dando una vuelta al ruedo tras finiquitar a su segundo oponente.

Muy verde se vio aún a Alejandro Pavón, pese a estar placeado, para comparecer en una plaza como la Maestranza. En su primer oponente, 2º de la noche, un bravo novillo cárdeno de bella estampa, jamás se acopló con él ni con el capote, ni con la muleta. Dió un auténtico recital con la espada, teniendo que usar el verduguillo para finiquitar al novillo hasta en siete ocasiones. En el segundo novillo de su lote, quinto de la tarde, mostró más voluntad y ahínco por agradar al público presente en los tendidos, pero alargó en exceso el trasteo con el animal, resultando un tanto soporífera y falta de ritmo. Volvió a matar muy mal y el novillo se le echó.

Y llegó Paco Lama de Góngora, del Arenal, estudiante de Derecho, cofrade de los Estudiantes y de San Isidoro, derramando sevillanía por los cuatro costados. Venía de alzarse con el primer puesto en la final del ciclo de novilladas de las Escuelas Taurinas de Andalucía, celebrado en Ronda, y se le vio muy predispuesto al triunfo en todo momento.

Suyos fueron los momentos más emotivos e intensos con la muleta en el primero de su lote, 3º de la noche, al que hizo las cosas con cabeza e inteligencia, dándolo al novillo el sitio que este requería. Mató de una decente estocada, algo desprendida, cortando la única oreja de la noche y dando una clamorosa vuelta al ruedo. En el segundo de su lote, 6º de la noche, volvió a mostrar su oficio con el capote y en la faena de muleta, aunque quizás ésta tuviese algunos altibajos en su desarrollo, yendo de más a menos. Aunque pinchó dos veces antes de fulminar a su oponente con una buena estocada, no se le puede reprochar sus ganas de hacerlo bien, y por derecho, en todo momento.

Culminado el festejo de hizo público el fallo del jurado, compuesto por Alfonso Ordóñez, Antonio Martínez "Finito de Triana", Luis Arenas y Antonio Ramón Jiménez. Lama de Góngora fue declarado triunfador de la noche y del ciclo de novilladas, recibiendo como premio un traje de luces. Miguel Ángel León, en clasificado en 2º posición, recibió un capote de paseo, otorgándole al tercer clasificado, Alejandro Pavón, el capote de brega.


Una buena noche de toros en Sevilla, la vivida por los miembros de esta Tertulia que nos hacen concebir esperanzas de cara al futuro de la Tauromaquia en nuestra ciudad.

(Fotos by Antonio Sánchez Sánchez, José Antonio Medina Valle y Joaquín Corchero Arcos)